¿Sigues aquí?
WOW, gracias, de verdad.
Mi historia con el marketing empezó sin buscarlo.
Estudié Periodismo porque me encantaba escribir, contar cosas, darle forma a ideas. Pero en algún momento descubrí que lo mío no era solo narrar lo que pasaba, sino crear lo que podía pasar.

TODO lo que pasó antes de que tú llegaras aquí
2020
–
Empiezo Periodismo (y me creo una peli)
Estoy convencida de que acabaré como reportera de guerra o escribiendo en The Guardian.
Spoiler: no pasa.
2023
–
Prácticas y punto de inflexión
En el penúltimo año hago prácticas en la redacción del Diario de Pontevedra… y descubro que eso no es lo mío.
Aquí empieza mi EVENTO CANÓNICO.
2024
–
Último curso y crisis existencial
Se acerca el final de etapa y yo estoy más perdida que el botón de cerrar sesión en TikTok.
Me planteo mandarlo todo al carajo y empezar de cero en otro sitio.
Quizá lo habría hecho, pero no tenía ese otro sitio.
Así que decido buscar trabajo. De lo que sea.
Junio 2024
–
Graduada y (des)orientada
Recibo el título. Ya soy periodista. ¿Y ahora qué?
Tengo claro que no quiero ejercer, así que empiezo a trabajar de dependienta en una tienda, sin rumbo ni meta clara.
Agosto 2024
–
La LLAMADA que lo cambia todo
Termina mi contrato y me pongo a buscar nuevas oportunidades.
Y entonces pasa: me llaman de la Universidad.
¿Te acuerdas de esas prácticas que había solicitado hace meses? Las que me habían dicho que no. Pues ahora hay un hueco.
Digo que sí, sin mucha emoción. No me apetece volver al periodismo.
Pero se enciende una bombillita: ¿Y si hay más caminos?
Pregunto en gabinetes de comunicación, empresas, despachos… y como último recurso, en agencias de publicidad.
Y ahí, justo ahí, empieza todo.
Septiembre 2024
–
Fuera de lugar (o eso parece)
Llego el primer día con mil dudas (y la agencia también: han cogido a alguien de periodismo, ¡a ver qué tal!).
Yo no tengo ni idea de qué va esto, pero algo me dice que me va a gustar.
Diciembre 2024
–
“Queremos que te quedes”
Los días vuelan. Lo que hago me engancha, me divierte, me reta.
Empiezo a encontrarme.
Las prácticas terminan, pero me proponen seguir.
Y digo que sí, esta vez con muchas ganas.
Febrero 2025
–
Se hace la luz
Ya no hay dudas. Quiero esto.
Marketing, redes, comunicación, ideas, estrategia…
Lo quiero todo. Quiero aprender más, saber más, probar más.
(Y aquí es donde empiezo a construirlo en serio).
Marzo 2025
–
La cosa se pone seria
Empiezo un máster en Marketing Digital y Social Media.
Por primera vez en mucho tiempo, siento que estoy justo donde quiero estar.
Me flipa. Lo disfruto. Me engancha.
Y me confirma que sí: esto es lo mío.
F.A.Q. SIN CORBATA
Preguntas que me soléis hacer 😉
Si has llegado hasta aquí haciendo scroll, es que algo te interesa —quizás hasta te estás planteando llamarme. Y como soy generosa (y práctica), voy a adelantarte las respuestas a esas preguntas que seguro me harías en una entrevista. Así ganamos tiempo los dos, jeje.
¿En serio cambiaste Periodismo por Marketing? ¿Sin pedirle consejo antes a ChatGPT?
Sí, sí, como lo oyes: sin inteligencia artificial de por medio. El periodismo nunca terminó de llenarme del todo; siempre sentí que me faltaba una parte creativa por explorar. En el marketing, por fin, he encontrado ese lugar donde puedo dar rienda suelta a la creatividad y sentirme realmente en mi sitio.
¿Te da miedo no encajar en un sector tan cambiante y tan diferente al del periodismo convencional?
Si te soy sincera, claro que me da miedo. En realidad, estoy bastante acojonada. Pero de eso va también la vida, ¿no? De cambiar, arriesgar, fallar… y, de vez en cuando, acertar. Así que quién sabe, igual esta es la buena.
Si fueras una campaña de marketing… ¿Qué eslogan llevarías?
Menuda pregunta más obvia… Está clarísimo:
Activa tu modo Bel: ideas sin corbata y alguna que, con suerte, brilla más de lo esperado.
¿Qué harías si mañana te dijeran que todo lo que sabes de marketing está mal?
Pues lo primero: colapsar un poquito. Lo segundo: tirar de mi vena periodística, investigar como si se acabara el mundo… y reinventarme. Porque si algo tengo claro es que saber adaptarse vale más que sabérselas todas.
Para ir terminando… BASTA DE HABLAR DE MI
Sé que sigo llamando tu atención (lo digo porque, oye, sigues aquí), pero tampoco quiero sonar demasiado egocéntrica. Así que hasta aquí mi historia personal. Ahora te toca a ti: puedes cotillear mis trabajos… o escribirme y contarme la historia de tu empresa.